lunes, 16 de noviembre de 2020

2 crónicas 18. Cuidado con las malas Amistades

 

Los seres humanos somos moldeables es decir siempre tendemos hacer lo que vemos o lo que nos dicen.

Nuestra forma de actuar por lo general esta direccionada por el medio en el que vivimos.

Las conversaciones que tenemos con los demás es lo que determina nuestra forma de ser, las malas conversaciones dañan nuestras buenas costumbres. 1 corintios 15: 33 “No os dejéis engañar: «Las malas compañías corrompen las buenas costumbres».

Josafat era un magnifico rey que tenía una muy buena relación con Dios, esto quiere decir que su caminar estaba direccionado por Dios. 17: 3-4 “Y Jehová estuvo con Josafat, porque anduvo en los primeros caminos de David su padre, y no buscó a los baales; Sino que buscó al Dios de su padre, y anduvo en sus mandamientos, y no según las obras de Israel.

Nuestras malas amistades comienzan cuando no tenemos cuidado con quien nos relacionamos. 18: 1 “Tenía, pues, Josafat riquezas y gloria en abundancia, y contrajo parentesco con Acab.

Para saber qué tipo de amistades son las que nos convienen debemos saber muy bien que es lo que queremos lograr en la vida o cuales son nuestros propósitos.

A que nos Lleva una mala Amistad.

1. Nos meten en problemas que no son nuestros. V 2 “Y después de algunos años descendió a Samaria para visitar a Acab; por lo que mató Acab muchas ovejas y bueyes para él, y para la gente que con él venía: y le persuadió que fuese con él contra Ramot de Galaad.” Muchas veces en nuestro hogar vivimos en un paraíso, pero vivimos de manera personal en un infierno por culpa de otras personas.

2. Nos sentimos parte de los Problemas de los Demás. V 3 “Y dijo Acab rey de Israel a Josafat rey de Judá: ¿Quieres venir conmigo contra Ramot de Galaad? Y él respondió: Yo soy como tú, y mi pueblo como tu pueblo; iremos contigo a la guerra.” Muchas personas pierden su tranquilidad y su paz por causa de otros.

·       2.1. Algunas personas en su casa lo tienen todo para ser felices, un buen esposo(a) buenos hijos. Etc. Pero viven infelices por culpa de las malas amistades.

3. Nos comprometemos en cosas que no nos conviene. V 28 “Y dijo Acab rey de Israel a Josafat rey de Judá: ¿Quieres venir conmigo contra Ramot de Galaad? Y él respondió: Yo soy como tú; y mi pueblo como tu pueblo; iremos contigo a la guerra.” Josafat había exigido que se consultara a un verdadero profeta. V 6 “Pero Josafat dijo: ¿Hay aún aquí algún profeta de Jehová, para que por medio de él preguntemos?” el profeta les dijo que nos subieran, pero no le hicieron caso. De nada sirve que pidamos consejos a Jesucristo o a cualquier otra persona si no queremos escuchar.

Las personas que tienen malas Amistades no quieren escuchar los consejos de sus padres o de las demás personas que tienen experiencia y sabiduría.

Las personas con malas compañías piden consejos esperando que la respuesta sea favorable a la decisión que ya en su corazón han tomado.

4. Actuamos de manera Insensata, exponiéndonos al peligro. V 29 “Y dijo el rey de Israel a Josafat: Yo me disfrazaré para entrar en la batalla, pero tú vístete tus ropas reales. Y se disfrazó el rey de Israel, y entro en la batalla” nuestros malos amigos solo quieren escudarse en nosotros para ellos liberarse de los problemas. V 30 “Había el rey de Siria mandado a los capitanes de los carros que tenía consigo, diciendo: No peleéis con chico ni con grande, sino sólo con el rey de Israel

·       4.1. La misericordia de Dios hizo que Josafat no muriera por equivocación. V 31-32 “Cuando los capitanes de los carros vieron a Josafat, dijeron: Este es el rey de Israel. Y lo rodearon para pelear; mas Josafat clamó, y Jehová lo ayudó, y los apartó Dios de él; Pues viendo los capitanes de los carros que no era el rey de Israel, desistieron de acosarle.” hoy en día cuantas personas que tienen malas relaciones no han contado con la misma bendición de Josafat y si han muerto producto de una equivocación.

Como tener Buenas Amistades.

1. Ten un Propósito claro. Si no sabes que es lo que quieres conseguir tampoco sabrás quien te puede ayudar.

2. Piensa si esa persona con la que te vas a relacionar si te puede ayudar a conseguir lo que quieres.

3. Pídele a Jesucristo que te de sabiduría. Solo la sabiduría de Jesucristo en nosotros hará que podamos tener discernimiento para saber quién nos conviene y quien no nos conviene.

Mientras estemos en este mundo siempre estaremos en contacto con todo tipo de personas una buenas o tras malas, no podemos evitar su contacto, pero si podemos mantenernos alejados de sus prácticas.