sábado, 28 de noviembre de 2020

2 crónicas 30. Fiesta para Cristo

 

Cuando los seres humanos vivimos algún momento de alegría lo expresamos de alguna manera la forma más común de expresarlo es a través de una fiesta.

Hacemos fiesta por cumpleaños, por matrimonio, por bautismo, porque le subieron el salario. Etc.

Jehová quiere que así como somos eufóricos para mostrar nuestra alegría con lo secular, también expresemos nuestra alegría y agradecimiento por lo que Jesucristo ha hecho por nosotros.

Cuando el pueblo de Israel tenía que salir de Egipto Dios les dijo que tenían que celebrar la pascua que significa. Fiesta, paso o salida. Esto era una manifestación de su alegría por lo que Dios había hecho por ellos. El rey Ezequías consideraba que ahora era libre Dios les perdono por los pecados de sus padres por lo tanto quería hacerle fiesta a Jehová. V 2 “Y el rey había tomado consejo con sus príncipes, y con toda la congregación en Jerusalén, para celebrar la pascua en el mes segundo

La única forma de hacer esa fiesta para Jehová era congregándose. V 13 “Y se reunió en Jerusalén mucha gente para celebrar la fiesta solemne de los panes sin levadura en el mes segundo, una vasta reunión” en lo secular no podemos hacerle fiesta a alguien cada quien, desde nuestra casa, es necesario reunirnos en algún lugar.

Hoy cuando nos congregamos en el templo no solo lo hacemos para pedir un milagro lo hacemos para hacerle una fiesta de agradecimiento por todo lo que él ha hecho en nuestra vida. Ahora somos libres. 2 corintios 5: 17 “De modo que, si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.

Como lograr hacer una gran fiesta para Dios.

1. Tener un corazón libre de toda rebeldía. V 7 “No seáis como vuestros padres y como vuestros hermanos, que se rebelaron contra Jehová el Dios de sus padres, y él los entregó a desolación, como vosotros veis.” la rebeldía no siempre tiene que ver con sublevarse, el hacer las cosas de mala gana o fuera de tiempo también es una forma de rebeldía.

2. Dejando todo orgullo que nos impide postrarnos delante de Dios. V 8 “No endurezcáis, pues, ahora vuestra cerviz como vuestros padres; someteos a Jehová, y venid a su santuario, el cual él ha santificado para siempre; y servid a Jehová vuestro Dios, y el ardor de su ira se apartará de vosotros.” El postrarnos cuando oramos es una muestra de nuestra honra.

3. Creyendo que si buscamos a Dios él se encargara de cuidar y dar libertad a nuestros hijos y a toda nuestra familia. V 9 “Porque si os volviereis a Jehová, vuestros hermanos y vuestros hijos hallarán misericordia delante de los que los tienen cautivos, y volverán a esta tierra: porque Jehová vuestro Dios es clemente y misericordioso, y no apartará de vosotros su rostro, si vosotros os volviereis a él.” esto no quiere decir que si alguien se hace cristiano ya toda su familia por extensión son salvos. La salvación es personal. Al tener Dios misericordia de nuestros familiares significa que ellos pueden llegar a aceptar a Cristo con más facilidad.

4. Siendo humildes. V 11 “Con todo eso, algunos hombres de Aser, de Manasés, y de Zabulón, se humillaron, y vinieron a Jerusalén” Ser humilde no es sentirse menos que los demás. Ser humilde es reconocer que tenemos debilidades y que necesitamos ayuda de Dios y de los demás.

5. Dejando que Dios nos dé un corazón nuevo para poderle adorarlo. V 12 “En Judá también estuvo la mano de Dios para darles un solo corazón para cumplir el mensaje del rey y de los príncipes, conforme a la palabra de Jehová” Jesucristo sensibiliza nuestro corazón para poder sentir su presencia.

6. Estando dispuestos a dejar todo aquello que daña nuestro corazón y nuestra manera de vivir. V 14 “Y levantándose, quitaron los altares que había en Jerusalén; quitaron también todos los altares de incienso, y los echaron al torrente de Cedrón.” Quietar lo que nos distrae de la presencia de Dios es nuestra Decisión.

7. Proponiéndose gozarse con la presencia de Dios. V 21 “Así los hijos de Israel que estaban en Jerusalén celebraron la fiesta solemne de los panes sin levadura por siete días con grande gozo: y glorificaban a Jehová todos los días los levitas y los sacerdotes, cantando con instrumentos resonantes a Jehová.” si te congregas hazlo con alegría de nada sirve congregarse solo porque nos toca. Dios no quiere gente obligada.

8. No adores con afán. Si le vas hacer fiesta no estés pendiente del reloj para salir corriendo antes que los demás. V 23 “Y toda aquella asamblea determinó que celebrasen la fiesta por otros siete días; y la celebraron otros siete días con alegría.” Lo más desagradable para cualquier persona es saber que alguien está con nosotros, pero con afán.

Dios está buscando más que un gran montón de gente solo necesitada de un milagro. Todos desean recibir un milagro aun los más malos si están enfermos buscan sanidad o si están endeudados buscan prosperidad. Si tú y yo buscamos a Dios por lo mismo entonces en que nos diferenciamos de ellos. Dios está buscando un pueblo de adoradores de hombres y mujeres enamorados de Dios.