Muchas personas toman la decisión de convertirse en cristianos porque esperan que Jesucristo les quite todos sus problemas y cuando se dan cuenta que su vida sigue igual se desaniman y reniegan de Cristo.
Que Jesucristo
este con nosotros no significa que no tengamos problemas.
Cuál es la diferencia
de estar con Cristo o estar sin él, sin Jesucristo tenemos problemas y los
problemas terminan dominándonos.
Con
Jesucristo también tenemos problemas per somos nosotros quienes dominamos a los
problemas.
Cuando no
sabemos dominar nuestros problemas, nos desesperamos y la desesperación hace
que no podamos controlar nuestros problemas.
Que sucede cuando Cristo está con Nosotros.
1. Desarrollamos
tolerancia los unos a los otros. V 4 “Así ha dicho Jehová:
No subáis ni peleéis contra vuestros hermanos; vuélvase cada uno a su casa,
porque yo he hecho esto. Y ellos oyeron la palabra de Jehová, y se volvieron, y
no fueron contra Jeroboam.” Lo que más
daña cualquier relación es la mala convivencia, la única forma de mantener una
excelente convivencia es si aprendemos a soportarnos los unos a los otros.
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1.1. Sin Jesucristo sería imposible
soportarnos, por eso en este mundo son muchos los hogares destruidos y las
relaciones a punto de desvanecerse.
2. Recapacitamos
cuando tomamos malas Decisiones. V 1 “Cuando vino Roboam a
Jerusalén, reunió de la casa de Judá y de Benjamín a ciento ochenta mil hombres
escogidos de guerra, para pelear contra Israel y hacer volver el reino a Roboam” nuestra naturaleza es pecaminosa por esta razón
siempre estamos expuestos a pensar en lo malo, pero Jesucristo hace que
reconsideremos lo que pensábamos hacer.
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2.1. Las personas valientes no son
las que nunca se equivocan, las personas valientes son aquellas que tienen el
coraje para aceptar sus errores para corregir a tiempo.
3. Vamos
fortaleciéndonos de manera paulatina. V 5 “Y habitó Roboam en
Jerusalén, y edificó ciudades para fortificar a Judá” cuando
estamos sin Cristo en nuestro corazón se apodera de nosotros la ansiedad y
queremos hacer las cosas de manera rápida razón por la cual muchas veces nos
equivocamos.
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3.1. El adagio popular dice del
afán no queda sino el cansancio, con Cristo desarrollamos paciencia para lograr
lo que nos proponemos en el momento adecuado.
4. Tenemos la
capacidad de prepararnos para los tiempos difíciles. V 11 “Reforzó también las
fortalezas, y puso en ellas capitanes, y provisiones, y vino, y aceite” el estar con Jesucristo no significa que estemos libres de
problemas.
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4.1. Jesucristo no nos promete
quitarnos los problemas, él nos promete que estará con nosotros cuando estemos
pasando por esos problemas. Isaías 43: 2 “Cuando pases por las
aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por
el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti”
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4.2. Si Dios no promete quitarnos
los problemas entonces cual es la diferencia de ser cristiano o no serlo.
Quienes no están con Cristo solo miran problemas, quienes estamos con Cristo
además de ver los problemas también vemos la solución.
5. Las
personas que siguen a Jesucristo buscan nuestra amistad y nos dan su apoyo. V
16 “Tras aquellos acudieron también de todas las tribus
de Israel los que habían puesto su corazón en buscar a Jehová Dios de Israel; y
vinieron a Jerusalén para ofrecer sacrificios a Jehová, el Dios de sus padres.” Jesucristo nos da de su gracia ante las demás personas
esto hace que les seamos agradables.
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5.1. El respaldo de Jesucristo y de
las personas que el utiliza para ayudarnos se mantiene mientras estemos sujetos
a él. V 17 “Así fortalecieron el reino de Judá,
y confirmaron a Roboam hijo de Salomón, por tres años; porque tres años
anduvieron en el camino de David y de Salomón”
Cuando
estamos alejados de Cristo luchamos en nuestras fuerzas. V 22-23 “Y puso Roboam a Abías hijo de Maaca por jefe y príncipe de
sus hermanos, porque quería hacerle rey. Obró sagazmente, y esparció todos sus
hijos por todas las tierras de Judá y de Benjamín, y por todas las ciudades
fortificadas, y les dio provisiones en abundancia, y muchas mujeres” el problema de luchar en nuestras fuerzas es que
siempre terminamos cansándonos, desanimándonos y todo lo que hacemos nos queda
mal.
Estar con
Jesucristo no significa que no tendremos problemas, significa que si estamos
con Jesucristo los problemas no nos dominan por esta razón estamos libres de
ansiedad y sin ansiedad podemos ver con más facilidad la solución.