Salomón ya había terminado de construir el Templo ahora tenía una tarea también bastante difícil, esa tarea era amoblar el templo. Cada una de las cosas que nos muestra este capítulo posiblemente no tiene ningún significado en especial, pero si debían escogerse de manera meticulosa ya que no podían desentonar con la arquitectura del templo. Para decorar el templo o cualquier otra casa debe tenerse muy en cuenta cual es el presupuesto con el cual contamos y de esta manera no hacer gastos innecesarios.
Los muebles
en una casa no solo tienen que ver con suplir una necesidad, también cumplen un
papel muy importante en el embellecimiento.
Nosotros
somos templo de Dios por lo tanto también debemos tener en cuenta como nos
podemos embellecer tanto en lo físico como en el Alma.
1. Ten una
Buena Actitud. De nuestra actitud depende nuestra sana convivencia con los
demás. Salmos 133: 1 “¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es Habitar los
hermanos juntos en armonía!”
nuestra actitud es la que determina que nos amen o que nos odien.
2. Ten
Cuidado en tu forma de Hablar. Proverbios 15: 1 “La blanda respuesta
quita la ira;
Mas la palabra áspera hace subir el furor.” nuestra
forma de hablar hace parte de una hermosa decoración en nuestra vida.
Cuando
hablamos de nuestra boca deben salir palabras que restauren y ayuden a los
demás a sazonar su vida, muchas personas tienen una forma de vida desabrida,
sin sabor. De nuestra forma de hablar depende que otros enriquezcan su vida.
Colosenses 4: 6 “Sea vuestra palabra siempre con gracia, sazonada con sal,
para que sepáis cómo debéis responder a cada uno”
3. Vístete
de Manera Decorosa. Este mandato no solo es para la mujer, el hombre también
debe vestirse de tal manera que sea agradable ante los demás en especial para
su pareja, nuestro vestir debe hacer que nuestra pareja y familiares se sientan
orgullosos de nosotros y no avergonzados. Éxodo 28: 2 “Y harás vestiduras sagradas a Aarón
tu hermano, para honra y hermosura.”
4. Ten
bunas normas de Comportamiento. En tiempos antiguos se le llamaba: normas de
urbanidad. Es decir, se nos enseñaba cómo comportarnos ante los demás.
4.1.
Ante las Mujeres: darles la mano al bajar por escaleras, abrirles la puerta del
automóvil.
4.2.
Ante los Ancianos: cederles el asiento de un bus, ayudarles a pasar la calle.
Etc.
4.3.
Decir: gracias, por favor. Etc. Estas palabras no cuestan nada pero si
enriquecen mucho a los demás.
Estas
son tan solo algunas maneras de comportamiento. Cada uno de nosotros podemos pensar
en que hacer o cómo comportarnos para agradar a los demás. Recuerda que los
demás nos tratan de la misma forma como nosotros los tratamos a ellos. Mateo 7:
12 “Así que, todas las cosas que queráis que los hombres hagan
con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque esto es la ley y los
profetas.”
Salomón
quería amoblar el templo de la mejor manera con el fin de que fuera el
complemento de la hermosura en su edificación. Nuestra actitud es el mobiliario
que complementa la belleza física que podamos tener.