En este capítulo nos cuenta como el Rey Saul toma la decisión de quitarse la vida física. V 4 “Entonces dijo Saúl a su escudero: Saca tu espada y traspásame con ella, no sea que vengan estos incircuncisos y hagan escarnio de mí; pero su escudero no quiso, porque tenía mucho miedo. Entonces Saúl tomó la espada, y se echó sobre ella.” muchos de nosotros tomamos la decisión de quitarnos la vida, pero no la física, la emocional y terminamos teniendo una vida sin vida.
Jehová nos ha dado todo para que podamos ser felices, pero muchas veces tomamos la decisión de ser Infelices.
La vida es mucho más sencilla de lo que creemos, pero la sociedad en la que nos encontramos nos empuja y anima cada día a “llegar”, a “triunfar”, a competir imaginariamente con los demás y así ensalzarnos y ser “el mejor”, “el que más tiene”. Hemos creado un mundo tan artificial, que sufrimos de estrés, ansiedad y enfermedades psicosomáticas por esa idea absurda de competencia, de orgullo y ego.
Los causantes de nuestra muerte espiritual o emocional no son los demás ni mucho menos los problemas, los causantes somos nosotros mismos.
Que Produce Nuestra Muerte Espiritual.
1. Desobediencia a Dios. V 13 a “Así murió Saúl por su rebelión con que prevaricó contra Jehová,” Dios quiere lo mejor para nosotros, pero no nos gusta obedecer.
1.1. Impaciencia. 1 Samuel 13: 8 “Y él esperó siete días, conforme al plazo que Samuel había dicho; pero Samuel no venía a Gilgal, y el pueblo se le desertaba” la impaciencia nos lleva a tomar malas decisiones.
1.2. Las Excusas. Jeremías 1: 7 “Y me dijo Jehová: No digas: Soy un niño; porque a todo lo que te envíe irás tú, y dirás todo lo que te mande” las excusas nos hacen quedar bien, pero nos impiden desarrollarnos y crecer.
1.3. Apego a las cosas del Mundo. Génesis 19: 26 “Entonces la mujer de Lot miró atrás, a espaldas de él, y se volvió estatua de sal.” El mirar hacia atrás nos estanca y nos impide avanzar hacia nuestras metas o propósitos.
2. No Consultar a Jehová. V 13 b, 14 “contra la palabra de Jehová, la cual no guardó, y porque consultó a una adivina; y no consultó a Jehová; por esta causa lo mató, y traspasó el reino a David hijo de Isaí.” las personas que creen sabérselas todas por lo general se estancan y pierden la capacidad de aprender cosas nuevas.
2.1. Pereza para Estudiar la Palabra. Marcos 14: 37 “Vino luego y los halló durmiendo; y dijo a Pedro: Simón, ¿duermes? ¿No has podido velar una hora?, Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está dispuesto, pero la carne es débil” el estudio de la palabra tiene que ir acompañado de Oración.
2.2. Poco Tiempo de Oración. Lucas 5: 15-16 “Pero su fama se extendía más y más; y se reunía mucha gente para oírle, y para que les sanase de sus enfermedades. Mas él se apartaba a lugares desiertos, y oraba.” una buena comunicación nutre cualquier tipo de relación.
2.3. Congregarse de manera Intermitente. La recomendación del Apóstol Pablo es no dejarnos de Congregarnos. Hebreos 10: 25 “no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca.” el relacionarnos con otras personas que comparten lo nuestro nos estimula a seguir avanzando.
Que Produce Nuestra Muerte Emocional. Dentro de nuestras emociones están nuestros sueños o nuestros anhelos.
1. Pensamientos negativos. La Recomendación de Pablo es que en nuestra mente siempre tengamos pensamientos positivos. Filipenses 4: 8 “Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad.”
2. Malas Conversaciones. Nuestros pensamientos se alimentan de lo que escuchamos aprendemos tanto de lo bueno como de lo malo. 1 corintios 15: 33 “No erréis; las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres.” los seres humanos somos influenciables.
3. Perdida de la Capacidad de Soñar. Muchas personas una vez que pasan los cincuenta entran en una etapa de depresión y deterioro emocional y físico porque se creen improductivos. Josué 14: 10-11 “Ahora bien, Jehová me ha hecho vivir, como él dijo, estos cuarenta y cinco años, desde el tiempo que Jehová habló estas palabras a Moisés, cuando Israel andaba por el desierto; y ahora, he aquí, hoy soy de edad de ochenta y cinco años. Todavía estoy tan fuerte como el día que Moisés me envió; cual era mi fuerza entonces, tal es ahora mi fuerza para la guerra, y para salir y para entrar” no importa la edad o las condiciones en las que estas viviendo nunca dejes de soñar, son nuestros sueños y anhelos de alcanzar nuevas cosas las que nos mantiene con vida.
Dios a todos nos ha dotado de talentos y dones para llegar a ser personas de éxito es nuestra decisión que queremos ser. Las personas de éxito son aquellas que han mirado los problemas como oportunidades para mejorar, las personas de fracaso son aquellas que miran en los problemas obstáculos para seguir avanzando.